En el pasado siglo XX la publicidad estaba creada para televisión, radio y prensa escrita, pero al empezar el siglo XXI llego internet y con los años la nueva manera de hacer publicidad online, gracias a las redes sociales. Las empresas de marketing empezaron a buscar influencers unas personas con las que todo el mundo se identificaba sobre todo los jóvenes, ya que eran gente como tú y como yo, que estaban en casa y desde allí subían fotos y videos que compartían en sus redes favoritas, al poco tiempo las empresas vieron que eran los nuevos “famosos” y que la gente se identificaba con ellos, así que les ofrecieron pequeños trabajos o campañas de publicidad remuneradas o en las que les regalaban sus productos. Al buscar influencers y no cantantes, presentadores/as, modelos, actores o actrices, la gente de a pie lo veía como algo más natural, llamaba más la atención y a la vez se vendían mejor estos productos. Al ser online tanto se podía anunciar algo físico como digital, como
